Camau explicó la necesidad de que Nación disponga fondos extraordinarios el desastre de las inundaciones

El senador nacional Carlos Camau Espínola destacó hoy que el proyecto de ley para declarar al Litoral argentino como zona de desastre y emergencia por 180 días busca garantizar una asistencia económica para las familias y los sectores económicos afectados por las inundaciones en enero de 2019.

“Este proyecto lo impulsamos en el bloque con el senador Miguel Ángel Pichetto para que el Ejecutivo nacional asista a los departamentos afectados por intensas lluvias y crecida de ríos y arroyos en Corrientes, Chaco y norte de Santa Fe”, explicó Espínola.

El senador nacional por Corrientes dijo que “en nuestra provincia la situación de distintos sectores productivos ya venía muy afectada por la crisis económica y todo empeoró con estas dos semanas de lluvias intensas que provocan grandes pérdidas”.

Camau aclaró que el proyecto de ley implica una “asistencia financiera para las actividades económicas damnificadas y beneficia a todos los sectores no comprendidos en la ley de emergencia agropecuaria, en particular turismo y comercio”.
“Por ejemplo, se establece la exención impositiva, suspende ejecuciones de la AFIP y juicios por motivos tributarios, en el caso de todos aquellos sectores afectados en nuestra economía regional”, agregó.

También, la iniciativa establece un aumento de las partidarias presupuestarias que deberá destinar el Poder Ejecutivo nacional para aumentar los montos de los planes sociales que se pagan actualmente y así ayudar a las familias más pobres que padecen las inundaciones.
En Corrientes, desde la Capital hasta localidades del centro sur y noroeste del interior fueron gravemente afectadas por las inundaciones ocasionadas por un total de 400 milímetros de lluvias registradas en los primeros 16 días de enero.
Ante el registro de rutas y puentes perjudicados por el paso del agua, Camau Espínola explicó que el proyecto también dispone que el Gobierno nacional destine fondos de inmediato para concretar los arreglos correspondientes con las obras públicas que sean necesarias.